Las nuevas formas de Spam

infortunada manera de usar los nuevos medios de comunicación. Asociado originalmente con el correo no deseado, actualmente está compuesto por innumerables formas de generar información no deseada en prácticamente cualquier medio. En éste momento, que por razones e intereses políticos muchas personas utilizan los nuevos medios intensivamente, el problema del SPAM se agudiza, en especial porque ya ni siquiera es generado por máquinas, lo cual lo hace más difícil de detectar o filtrar. A continuación un par de ejemplos y mis comentarios sobre ello. Disfrútenlo.

¿Qué es Spam?, una forma distinta de inmoralidad

Ya hace algún tiempo, tal vez de los primeros escritos largos y concienzudos que escribí, fue sobre el SPAM, sus intereses y cómo combatirlo. En esa época (increíble que hablemos de épocas pasadas de hace 3 años), el principal enfoque que se tenía sobre el tema era la dificultad de controlarlo y los recursos que consumía, eso no ha cambiado y se podría decir que sigue sin solución: la mayoría del tráfico de Internet es contenido no deseado, usualmente no lo vemos en nuestras bandejas pero los esfuerzos que se hacen para que eso suceda son cada vez más grandes. Desde hace varios años, el interés típico de campañas de correo no deseado ha sido económico. Alguna vez leí a alguien que decía que la moneda de internet se llama clic y es cierto, pero antes que los clics estuvieron los hits o visualizaciones de página que siguen contando como dinero para una página web. Con sólo visualizar un correo no deseado, se contabiliza la visualización y si dimensionamos la cantidad de personas que pueden visualizar un correo en un sólo día veremos que el problema es masivo. Si el interés es económico, el vehículo es la ignorancia y la falta de cuidado. Los correos virales, como presentaciones, campañas humanitarias, emergencias y otras genialidades de los creativos del SPAM, transportan direcciones de correo que se van acumulando en la medida en que se van reenviando, hasta que en algún punto llegan a una cuenta a la que accede un programa de envío que recolecta esas direcciones y envía nueva información no deseada. La solución es en realidad simple: no divulgue direcciones de correo, es decir, ponga las direcciones en el campo con copia oculta (CCO o BCC) entre otras soluciones más sofisticadas, así mismo, de manera general (para otros medios) la más efectiva es: use responsablemente los medios.

¿Qué sí cambió?, las nuevas formas de hacerlo

Como vemos el problema no se ha solucionado. Ahora parece más grave y muestra algo que para mí es muy desesperanzador: masividad de la falta de ética. El Spam se ha diversificado, tanto en formas como en fines, por ejemplo, ahora hay fines políticos. Yo he venido aumentando la diversidad de medios de comunicación, uso cuentas en Facebook, Twitter, Gmail, Youtube, Foros y obviamente mi blog, todos con características de comunicación muy distintas. En éstos medios he observado el terrible comportamiento de publicar cosas que sólo tienen el interés de llevar tráfico a alguna página. Un ejemplo claro es el blog, donde diariamente se registran comentarios con decenas de enlaces de venta de productos médicos o sitios pornográficos, afortunadamente, el blog tiene un mecanismo (Akismet) para detectarlos automáticamente y tenerlos a la espera de que yo los borre. Lo que éste mecanismo ahorra sólo es que yo los clasifique, labor que sería de todos modos muy ardua debido al volumen, sin embargo no ahorra el tráfico inicial que consumió ni los recursos de procesamiento necesarios para su clasificación. Igual después de que Akismet ha clasificado el mensaje como no deseado, me toca revisar y borrarlos manualmente dado que las reglas no son 100% efectivas, cuando una de ellas reporta equivocadamente una aparición de Spam se le llama falso positivo, es decir, algo que aparenta ser bien hecho o benéfico pero en realidad es malo. El spam entonces toma la forma de comentarios en línea. En mi cuenta de Twitter también recibo con frecuencia adhesiones de atractivas mujeres cuyo perfil es 1 ó 2 publicaciones y cientos de adhesiones (ella sigue a muchos pero pocos la siguen a ella, siendo atractiva, ¿no sería al revés?). Cuando uno visita estas cuentas, las únicas publicaciones son frases sugestivas que invitan a visitar cierta página, ya no de productos o compras sino de fotografías (evidentemente no son fotografías de ella) o de cualquier otra cosa, el caso es que finalmente llevan tráfico al sitio que pagó la campaña. Ésto puede ocurrir diariamente en millones de cuentas y si sólo un pequeño porcentaje de personas caen ya es mucho tráfico y si de esas personas otro pequeño porcentaje se vuelve visitante o quiere comprar o conocer un producto la campaña fue efectiva. Hasta acá, lo único que se ve en el Spam es un interés económico, válido pero antiético, que resulta inmanejable e inaceptable en ninguna sociedad civilizada (así sea muy tecnológica) y menos en la sociedad de la información. Internet parte de una confianza mutua y unas costumbres constructivas de colaboración y aporte, si esas reglas se rompen, incluso con el fin legítimo de ganar unos pesitos por la actividad, Internet se volverá un espacio corrupto y sin valor real.

Nuevos fines del Spam: la política

Una nueva y temeraria práctica, que sólo muy inescrupulosos personajes se atreven a practicar es la publicidad política en foros y blogs. Actualmente en Colombia se lleva a cabo la elección de presidente de la república. Esta ha sido una campaña atípica, en el sentido de que un candidato sin participación política tradicional ha explotado intensivamente las redes sociales en un fenómeno similar al de Barack Obama en Estados Unidos, al punto de obligar al otro candidato (el de las maquinarias tradicionales) a rediseñar su campaña. En éste rediseño hay indicios de uso de Spam para contaminar las discusiones del otro candidato y generar información que aparenta ser favorable para él. El SPAM de éste tipo es muy contraproducente, justo hace unos días en los enlaces interesantes de Mayo, reseñaba un caso que leí en el que una película acusa ser basada en hechos reales y cita las investigaciones de una doctora en Alaska. El blog que leí cuenta las supuestas bases reales: las investigaciones de la doctora, las noticias sobre las abducciones, etc., pero el autor hace una interesantísima y relevante investigación, encontrando que todo es creado, la doctora parece que sí existió pero no tiene esas investigaciones y el períodico que reporta los casos apenas tiene unos días de existencia. Otra forma de falsificar información es la creación de videos que aparentan ser espontáneos pero son direccionados hacia hacer creer algo, eso no es nuevo, lo nuevo es la forma de propagarlo. A pesar de lo anterior, a veces reconocer el spam es muy simple, los comentarios no deseados usualmente los publican programas que buscan ser irreconocibles para aquellos de detección, por eso a veces los comentarios son incoherentes, con mayúsculas entre palabras, espacios y letras cambiadas por símbolos que se parecen como cambiar s por $ o i por ¡ (letra i por símbolo de admiración). Éstos camuflajes son efectivos contra programas que buscan coincidencias exactas, pero los seres humanos entendemos el mensaje y terminamos visitando la supuesta página de caridad, medicinas ilegales o pornografía.

¿Cómo detectarlo?

Existen otros mecanismos para detectar el SPAM y son los patrones, es decir, lineamientos que usualmente cumplen las cosas falsas sin necesidad de buscar coincidencias exactas. Por ejemplo, ya les comenté el perfil del Spam en Twitter: mujeres atractivas que sólo tienen 1 ó 2 publicaciones y que siguen a cientos de personas pero pocas personas las siguen a ellas, eso es un patrón de comportamiento fácilmente identificable incluso para programas antispam. El Spam político cuenta con un ingrediente interesante: no lo crean programas. En los foros políticos, se detecta que la propaganda política la escriben personas pero aún así existe un patrón, son pequeños comentarios, repetitivos y simplistas que no responden a nada. Realmente lo que sí es fácil es reconocer los comentarios reales: usualmente son largos o más concienzudos y con frecuencia responden a algún otro comentario o proponen algo. En Colombia, el candidato de la maquinaria ha desplegado una campaña sucia, en la que publican comentarios propagandísticos en las conversaciones a favor del otro candidato y existen rumores de que se paga por comentario, lo cual puede resultar un poco exagerado. Los comentarios en cuestión son publicados en seguidilla por el mismo usuario o simultáneamente en varios hilos de discusión, los usuarios son muy nuevos, con apenas días de creación que no tienen seguidores ni información pública.

Conclusiones

¿Quién puede controlar eso?, ¿quién puede investigar que en varias discusiones se genera el mismo comentario, que el usuario es nuevo y que no tiene historia ni contactos? Sin importar si el fin es puramente económico o político, la falta de ética afecta todas las esferas y de nuevo observamos algo que se ha visto antes: Internet es un reflejo de la sociedad y por sí mismo no cambia nada. Debe existir un juicio moral coherente con los valores sociales en que nos movemos y hacia los que semueve la sociedad, sin ese juicio la sociedad se verá atrasada en sus logros. Sin moral, no importa la tecnología que inventemos, será imposible obtener resultados positivos reales y cada uno de nosotros es responsable por mejorar esa situación.]]>